Lamentamos comunicarles que el acto de presentación de Alejandro Valverde como nuevo corredor de Movistar Team para las próximas temporadas que debía celebrarse mañana en Madrid ha quedado aplazado. La Unión Ciclista Internacional (UCI) no ha permitido la presencia del corredor en el acto en virtud de una interpretación de la normativa internacional con la que nos mostramos en profundo desacuerdo, pero que nos vemos obligados a acatar ante las sanciones que su incumplimiento pudiera acarrear.
Este era el escueto comunicado de Movistar Team anunciado la suspensión de un acto que había despertado una enorme expectación, ya que debía ser entendido como el regreso del hijo pródigo no sólo de Movistar sino de todo el ciclismo español, una vez purgadas sus penas, aunque el acto fuera aún cincuenta días antes de su definitivo cumplimiento, fecha que debería ser entendida –o al menos así lo entiendo yo- como el final de su sanción, de su culpabilidad. Y del inicio de su reinserción, independientemente de las sospechas que se puedan tener, y que podrán implicar incrementar la vigilancia sobre el sospechoso, nunca la prolongación del castigo mediante penas accesorias nada claras.
Pues no, en aplicación del articulo 320 del Título 14 (Antidopaje) del Reglamento UCI, “se prohíbe a todo licenciado declarado suspendido participar, a título que sea, en una manifestación o actividad autorizada, reconocida u organizada por la UCI” y una amplia retahíla de entidades vinculadas o vinculables al deporte ciclista para que no quede ni el más mínimo resquicio reglamentario”. Conclusión, Valverde no será corredor mañana del Movistar; tendrá que esperar para la foto hasta el 1 de enero de 2012.
Sobran los comentarios. Algunos compañeros han hablado de cacicada. Personalmente creo que el calificativo más aplicable es el de persecución, y más teniendo en cuenta algunos antecedentes veraniegos que no vienen al caso, con lo que las perspectivas a partir del 1 de enero de 2012, cuando el corredor ya ‘firme’ con Movistar, son bastante más preocupantes a tenor de esta decisión que, por muy reglamentaria que sea, es innecesaria y contraproducente para el ciclismo, no sólo para Movistar y Valverde.
Foto: Valverde, en su época de amateur, para que no haya peligrosas relaciones a tenor del artículo mencionado.
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