Fue Vicente Trueba, en 1933, quien inició una tradición que durante mucho tiempo se mantuvo en el Tour de Francia, el protagonismo de los españoles como los mejores escaladores de la ronda gala. En cierto modo, luchar por esta clasificación secundaria era una forma de reconocer la imposibilidad de alcanzar metas mayores, aunque por razones más organizativas y técnicas que por las verdaderas posibilidades de nuestros ciclistas.
Aparte de Trueba, Julián Berrendero y Jesús Loroño subieron al podio final a recoger el premio, aunque fue Federico Martín Bahamontes quien supuso una transición afortunada para el ciclismo español, ya que aparte de seis reinados de la montaña, subió a lo más alto del podio. Julio Jiménez, por tres veces consecutivas, tuvo que conformarse con este premio, a pesar de que estuvo a punto de imitar al toledano como ganador absoluto, en 1967, mientras que los tres últimos ganadores españoles de la montaña –Aurelio González, en 1968, Pedro Torres, en 1973, y Txomin Perurena, en 1974, se impusieron de una forma muy distinta, peleando en los pequeños coles y no en las grandes ascensiones, una táctica que ha sido imitada en numerosas ocasiones desde entonces, aunque no por nuestros corredores.
Parece mentira que desde 1974 -descalificaciones aparte- un español no ganase la clasificación de la montaña del Tour. Quizá fuera simplemente porque en estos últimos años los objetivos han sido mucho más ambiciosos, aunque también es cierto que ha faltado decisión por parte de algunos ciclistas, tanto para imitar la forma ganadora de ‘el Aguila de Toledo’, por ejemplo, como la del vasco de Oyarzun.
Por ello, es de agradecer que la reforma en la puntuación de la clasificación de la montaña en este Tour 2011 haya primado a un escalador nato como Samuel Sánchez, que el próximo domingo –salvo revolución mañana en la crono- será el único español en el podio después de cuatro años estando en lo más alto –cinco, si contamos ese podio virtual de Oscar Pereiro-. Además, Samuel Sánchez será el primer español en llevarse en propiedad el ‘maillot a pois’, identificativo del rey de la montaña… desde 1975, algo que no pudieron hacer lógicamente nunca sus predecesores.
Que curioso¡¡¡ no lo sabia, felicidades Luís.
ResponderEliminarJAume Mas
Según comentaron en la retransmisión de TVE, hay otro ganador español reciente. Carlos Sastre, que era el 2º en 2008 y descalificaron al que era 1º, Khol. Por lo que, aunque no subió al podio en Paris, y aunque no aparezca en el historial (o ranking) del Tour, es el legítimo ganador, no?
ResponderEliminarSaludos
Efectivamente, y al me refiero aunque sin nombrarle (penúltimo párrafo, descalificaciones aparte). Sobre el mérito de los segundos que se encuentran un triunfo por decalificacion de los ganadores habría mucho que contar, aunque este no es el caso, ya que Sastre fue el ganador de esa edición, lo que prueba su 'presencia'
ResponderEliminarLo importante en lo que se refiere a este post es que no se vistió con el maillot en París, sólo con el amarillo; Samu ha sido el primero.
Luis Roman-Mendoza